Problemas que nos traen las muelas de juicio
A raíz de la evolución del ser humano los órganos dentales también han presentado cambios de forma, función o presencia. En algunos especímenes se han observado inclusive cuartos molares, es decir, una muela más atrás del tercer molar.
Se dice que debido a los cambios en la alimentación éstos han desaparecido y que posiblemente esto mismo también pasará con los terceros molares o mejor conocidos como muelas del juicio. Lo que sí es un hecho es que en las últimas décadas los dentistas hemos observado que cada vez es menor el espacio que queda hasta atrás después de que erupciona el segundo molar, provocando que la muela del juicio no se posicione adecuadamente.
Esto conlleva a problemas que con el tiempo y sin un monitoreo constante por parte del profesional pueda convertirse en una experiencia desagradable para los pacientes.
Pueden quedarse atrapados bajo la encía sin que se aprecien a la vista clínica, esto se llama “Molar incluido”, pero si erupcionó parcialmente y a la vista clínica se ve parte de él se llama “Molar retenido”, en ambos casos se debe tener cuidado y observación ya que se pueden presentar los siguientes problemas.
1.- Pericoronitis: es la infección causada por bacterias alrededor de la encía en muelas parcialmente erupcionadas, ya que no es posible cepillar adecuadamente esa zona y al reproducirse velozmente las bacterias producen intenso dolor, sangrado e inflamación.
2.- Caries interproximal: este tipo de caries aparece entre las 2 muelas, segundo molar y tercer molar, ya que no es posible pasar el hilo dental en zonas de difícil acceso, las caries son muy profundas y si ya han llegado al nervio por lo general deben extraerse ambas.
3.- Pérdida ósea o Periodontitis: En algunos casos la infección es tan grave y de mucho tiempo atrás que ya se han aflojado las muelas, de acuerdo a la valoración periodontal se decide si solo se quita el tercer molar y se queda el segundo realizando algún tratamiento o si ambos deben extirparse.
4.- Desalineación de los dientes frontales: al ejercer presión al terminarse de formar las raíces dentales de las muelas del juicio éstas mueven o rotan a los demás órganos dentales, que con unos unas semanas pueden hacer que cambien de posición de forma notoria. Es por eso que en tratamientos de ortodoncia es mejor quitarlas antes de comenzar.
5.- Formación de quistes: Si el paciente decide conservar sus muelas del juicio aunque se encuentren mal erupcionadas es recomendable aconsejarle que debe acudir cada 6 meses a una revisión y control radiográfico para evaluar que no se haya formado ningún tipo de quiste.
6.- Neuralgias: Debido a la presión generada por el tercer molar y al poco espacio disponible puede manifestarse dolor intenso espontaneo o crónico, así como también debido a que puede estar en contacto directo la raíz del tercer molar con el Nervio Dentario Inferior.
Si presentas alguna de estas afecciones acude a Odontotecks para realizarte una valoración.